domingo, enero 6

Gracia y el Forastero

« Es que los muertos no mueren de una vez, en un momento preciso, sino muchas veces, y a pausa. Ahogados.

Cuando el cadáver lleva días en el cementerio, o meses, todavía vive dentro de nosotros la persona que fue, y nos habla mientras dormimos, si bien ya ahí, en los sueños , comienza a morirsenos. Y en la memoria. Primero se muere un gesto suyo. Luego un rasgo cualquiera, sutil. ¿Cómo era su cuello? ¿Cómo sonreía? ¿Cómo entrecerraba los ojos con el sol? Así, a pausa, a pausa, se nos va muriendo en el difuminarse incontenible del recuerdo. En la traición nuestra, que significa seguir viviendo ». 


Guillermo Blanco