lunes, diciembre 10

El doctor Zhivago

« Me parece que sólo puedo sentirme moralmente celoso de una persona innoble y extraña. La rivalidad con un ser superior me suscita otra clase de sentimientos. Si un hombre espiritualmente cercano a mí, por el cual sintiera afecto, amase a la misma mujer a quien yo amara, experimentaría por él un sentimiento de dolorosa solidaridad, no de contraste ni aversión. Evidentemente, con él no podría conversar ni siquiera un instante sobre la persona amada, pero sería un sufrimiento distinto totalmente de los celos, no tan violento ni tan sanguinario. Lo mismo me sucedería con respecto a un artista que con la superioridad de su ingenio llegase más lejos que yo en obras afines a las mías. Probablemente renunciaría a mis intentos, ya superados por sus hallazgos. Pero divago. Creo que no te querría tanto, si no tuvieras algo que te hiciese sufrir, algo qué lamentar. No suelo querer a los que siempre han tenido razón, que no han caído jamás, que nunca se torcieron. La suya es una virtud apagada, de poco valor. A ellos no se les revela la belleza de la vida » .


Borís Pasternak