miércoles, octubre 5

Lógica & locura

«La locura es un sueño del que se puede despertar»

« La metáfora de la locura puede ser "un cuchillo que se clava en la mente y su corte no distingue con claridad genes e influencia ambiental". La demencia es externa e interna, un universo ocluso del que nada puede escapar. Una vez que es atrapada la lucidez, su descomposición es un caleidoscopio de sombras inasibles: pensamientos que no son capaces de relacionarse entre sí, que rompen la cáscara de la coherencia en un sinfín de fragmentos, tantos, como seres posibles hay en un ser real. La frontera del pensamiento es a menudo auto destructiva para quien la traspasa. 

La mente no tiene límites, pero no señala el borde que separa el valle de la razón con las cumbres de la locura. Es posible enloquecer por amor y odio, y hacerlo por la pura ausencia de sentimientos. Se puede enloquecer de lucidez, el sano juicio puede encadenar una fatiga profunda; la razón es un peso difícil de soportar durante toda una vida. Los criterios más absurdos e ilógicos sólo son casos límite de la razón en los que la lógica es crítica consigo misma. 


La locura es "una lógica que se ha cuestionado a sí misma", una autoconciencia que ha perdido el control establecido y se interna por caminos ignotos, por bosques sombríos de acechantes peligros en la mente que ha descuidado sus defensas aprendidas. En las 'Intempestivas', Nietzsche lucha desesperadamente por una armonía imposible en el universo del caos. En esa tensión dialéctica sólo es posible alcanzar la lucidez desde los bordes fronterizos de la locura. Pero no hablemos de locura, la locura no existe, sólo hay trastornos de la mente »