« Hoy he amanecido
como siempre, pero
con un cuchillo
en el pecho.
Ignoro quién ha sido,
y también los posibles
móviles del delito.
Estoy aquí
tendido
y pesa vertical
el frío.
He sido asesinado.
(Descarto la posibilidad del suicidio.)
La noticia se divulga
con relativo sigilo.
El doctor estuvo brillante,
pero el interrogatorio ha sido
confuso. El hecho
carece de testigos.
(Llamada la portera,
dijo que el muerto no tenía
antecedentes políticos.
Es una obsesión que la persigue
desde la muerte del marido.)
Por mi parte no tengo
algo qué declarar.
Se busca al asesino;
sin embargo,
tal vez no hay asesino,
aunque se enrede así el final de la trama.
Sencillamente yazgo
aquí, con un cuchillo...
Oscila, pendular y
solemne, el frío.
No hay pruebas contra alguien.
Nadie ha consumado mi homicidio ».
como siempre, pero
con un cuchillo
en el pecho.
Ignoro quién ha sido,
y también los posibles
móviles del delito.
Estoy aquí
tendido
y pesa vertical
el frío.
He sido asesinado.
(Descarto la posibilidad del suicidio.)
La noticia se divulga
con relativo sigilo.
El doctor estuvo brillante,
pero el interrogatorio ha sido
confuso. El hecho
carece de testigos.
(Llamada la portera,
dijo que el muerto no tenía
antecedentes políticos.
Es una obsesión que la persigue
desde la muerte del marido.)
Por mi parte no tengo
algo qué declarar.
Se busca al asesino;
sin embargo,
tal vez no hay asesino,
aunque se enrede así el final de la trama.
Sencillamente yazgo
aquí, con un cuchillo...
Oscila, pendular y
solemne, el frío.
No hay pruebas contra alguien.
Nadie ha consumado mi homicidio ».
José Ángel Valente