« Mi forma, mi carácter, mi deseo
Pensando que la noche azul se ponga
nada sueño en detrimento mío
La corona que tengo en la cabeza
la soporto con gran resignación.
Soy un rey desterrado en un retrete
No tengo pantalones y me escondo
debajo de mi cama muerto de hambre,
Me alimento de muchas musarañas.
La casa apuntalada de mis versos
es todo mi dominio personal
Y se orina mi alma por mis ojos
Si medito, me duermo en un rincón
y el sueño que podía serme útil
se mete en una pierna y no sé en cuál.
Mi candor, mi paciencia, mi descuido
Busco trabajo y pierdo mi salud
rezando mientras subo la escalera »
Rafael Morales