« Don Jacobo vive en la Avenida Santa Fe, entre el pasaje Uruguay y la calle Madison.
Hay un quiosco de diarios en Santa Fe y Madison y otro quiosco de diarios en Santa Fe y Uruguay. Don Jacobo toma todas las mañanas café en Santa Fe y Uruguay y antes de entrar a la cafetería compra el diario en esa misma esquina.
Por alguna razón misteriosa (quizá por algún prejuicio antisemita) el quiosquero de Santa Fé y Uruguay maltrata a don Jacobo. Siempre le habla mal en tono, le tira el diario en lugar de dárselo en la mano, le pasa mal la cuenta, le entrega el más arrugado de los ejemplares.
El mesero de la cafetería que lo atiende siempre y que le tiene afecto, le dice:
-Oiga don Jacobo, ¿Por qué deja que lo maltrate?
-¿Y qué quieres que le haga?
- No, no quiero que le haga algo, pero si éste tipo lo trata de esta manera ¿Por qué no compra el diario en otro quiosco?, después de todo, cuando viene de su departamento pasa por el quiosco de Madison Wisconsin antes de llegar al café.
Don Jacobo mira al mesero y le contesta:
-Ese imbecil me maltrata sin alguna razón... ¿Y me sugieres dejar que ÉL decida dónde voy a comprar mi diario? ¡De ninguna manera! »