“Por eso la comunicación, para el Psicoanálisis, es siempre fallida. No es posible comunicar porque no es cierto que utilicemos el mismo código y que las palabras puedan transmitir todo lo que se quiera decir. Siempre algo escapa a la voluntad del hablante y es ese lugar de malentendido el que nos importa. Ese instante en el que el lenguaje no sólo sorprende y deja perplejo al otro, sino al propio sujeto que se detiene, asombrado y dice: “No sé por qué dije eso” o “Mira lo que dije”… Y pretende desecharlo diciendo que no es lo que quiso decir, pero justamente eso que quiere tirar será lo que nosotros tomaremos. En este sentido, podemos decir que los analistas trabajamos con el basurero del lenguaje.”
Gabriel Rolon
No hay comentarios:
Publicar un comentario