viernes, diciembre 7

En la casa de baños

« Venía todos los días y se quedaba hasta la medianoche, hablaba con ella de distintas ciencias y de física... Le llevaba libros, ella tocaba el piano... Siempre se inclinaba más por los libros. Mi Dasha es ilustrada de por sí, los libros no le son necesarios, no son más que una diablura. Y él insistía todo el tiempo, lee esto, lee lo otro y consiguió aburrirla mortalmente. Me di cuenta de que se enamoró de ella. Pero se veía claramente que ella, nada. "Papá -me decía-, no me gusta porque no es militar". No es militar, pero eso no importa. Tiene categoría, es noble, está bien alimentado, es abstemio, ¿qué más se puede pedir? Se hicieron novios ».



Anton P. Chéjov